Las mamás también nos ponemos bellacas
Yo pensé que ya no tenía chispa, que con el parto me despedía de ese fuego.Mis tetas ya no eran para placer sexual, sino para alimentar. No quería que me las tocaran, ni me las desearan, eran solo para lactar al bebé. Así estuve muchos meses, sintiéndome tranquila, calmada, en reposo. Tenía que aceptarme. El nuevo cuerpo, el nuevo tiempo, el nuevo quererme. Me tomó tiempo poder verme, sentirme mía, sentirme rica, sentirme deseosa de sentir otros cuerpos.
Con el espacio y el tiempo, como si encendieran poco a poco, volvieron las chispas. Esas chispas son mías y me las conseguí yo, con ayuda de otres.Se siente como una nueva juventud, una nueva energía, esta vez una con más conocimiento, experiencia y sabiduría.
Me siento hermosa y en el ejercicio de ir reconociendo mis defectos, me miro al espejo y me doy cuenta de que veo lo que quiero.
Llevo meses sintiendo(me) en este brillo que me nace desde adentro y se huele en mis fluidos.
Desde que acepté la nueva yo, quiero abrazarla a fondo, dentro, conmigo misma y con el cuerpe de otres, con sus miradas, con sus sudores, con sus labios. En este despertar me abrazo profundo con sus deseos y los míos.Me besé al flaco, me restregué en el playero y dejé que el barbú me ablandara los miedos. Ahora me siento mejor, sé lo que quiero, se como sentirme y lo más importante ya sé cómo quererme.
Ser mamá y estar bellaca es un lío. Hay que sacar el tiempo, buscar concentrarte en el presente, atender al nene,dormirlo. Cuando me doy permiso y busco el espacio, me lo disfruto al máximo porque estoy clara de todo lo que he tenido que pasar para tener ese rato.
Yo tuve que mirarme al espejo miles de veces antes de poder desvestirme frente a otra persona, sacarme fotos, observarme desde distintos ángulos y hasta beber un poco antes del acto. Me atreví.
Ahora que lo pienso, agradezco mucho haber pasado por tantos cambios, soy menos perfecta y más atractiva; en mi útero hay fiesta porque reafirmo que estoy bien rica. Y no se trata de como me ven o como me veo, es sobre como me siento tiene todo que ver con el "como se siente".
En mi útero creador de vida hubo magia y sin dudas,mis jugosos labios la conservan.Eso me encanta y a elles también.
Porque sí, las mamás también nos ponemos bellacas.
La Luchona